Andalucía dobla la inversión en Escuelas de Verano: beneficiará a 2.000 niños vulnerables más que en 2021

La Junta de Andalucía ha duplicado el presupuesto destinado en el presente año al desarrollo del programa de ‘Escuelas de Verano’, que en este 2022 se extiende ya a 6.749 menores de entre 3 y 15 años de edad, lo que supone 2.051 niños más que el año anterior.

El Consejo de Gobierno andaluz en funciones ha tomado conocimiento este martes del informe al respecto de la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, impulsando así una «herramienta fundamental que favorezca la conciliación» de las familias con niños en las zonas más vulnerables de la región.

El informe elevado al Consejo de Gobierno constata que la dotación económica de este año, que se va a cofinanciar con fondos del Plan Corresponsables, se eleva hasta los 4,65 millones de euros. Esta cifra, según subraya la Junta, ha permitido poner en marcha 114 escuelas de verano repartidas por toda la comunidad, 41 más que en 2021.

Asimismo, a la generación de empleo directo que supone la organización de estas escuelas de verano, en torno a 941 puestos de trabajo, se añade el empleo indirecto generado, que va desde servicios de seguridad o limpieza a catering.

Según ha defendido la Junta, este programa se revela «imprescindible no sólo para garantizar tres comidas al día a los menores, sino también para que esos hogares con dificultades económicas o en situación de riesgo y exclusión puedan recurrir a estas escuelas de verano para facilitar el mantenimiento del empleo y que las responsabilidades de la crianza no dificulten el acceso al mundo laboral».

Adicionalmente, el incremento de la financiación, según subraya la Junta, va a posibilitar «la mejora de la calidad de la atención prestada a las familias gracias a la diversificación de las actividades, el incremento de personal contratado y, por tanto, la reducción de ratio».

Las actividades educativas y recreativas que ofrece el Gobierno andaluz a la población «más vulnerable» en verano forma parte «del compromiso adquirido por los Estados que suscribieron la Convención de Derechos de la Infancia en 1989», según explica la Junta, que detalla que este texto reconoce «la obligación de las administraciones públicas de respetar y promover el derecho de niños y adolescentes a participar plenamente en la vida cultural y artística, en condiciones de igualdad».

Instrumento contra la pobreza infantil

Por otro lado, el informe constata que la situación de la pobreza en Andalucía «se ha visto incrementada como consecuencia de la crisis económica y social ocasionada tras la pandemia de Covid-19», relata la Junta, que reconoce que, según la Encuesta de Condiciones de Vida de 2020, en la comunidad el 28,5% de las personas menores de 18 años se encuentra «en riesgo de pobreza o exclusión social».

Además, el 45,1% de los hogares monoparentales con al menos un hijo o hija dependiente estaba en riesgo de pobreza o exclusión social en 2020.

Los datos «evidencian también que la experiencia de pobreza en hogares con niños tiende a ser más prolongada que en otro tipo de hogares, por lo que hay un importante número de familias con hijos menores de edad que han de ser apoyadas por los sistemas de protección social públicos para mejorar sus condiciones de vida», recalca la Junta.

Desde el Gobierno andaluz sostienen que «la lucha contra la pobreza infantil en la comunidad autónoma es un reto de primer orden» para el Ejecutivo, y «muestra de ello» es el acuerdo de 22 de febrero de 2022 del Consejo de Gobierno, por el que se aprueba la formulación de la Estrategia por la infancia y la inclusión de Andalucía con el objetivo «último de romper la espiral de la pobreza en Andalucía y la transmisión intergeneracional de la situación de pobreza y/o de vulnerabilidad».

En este sentido, las Escuelas de Verano financiadas por la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación llegan a un sector de la población «muy vulnerable», de niños entre 3 y 15 años pertenecientes a hogares familiares con dificultades económicas en situación o riesgo de exclusión social que, previamente, han sido valoradas y derivadas por los servicios sociales comunitarios.

Actividades de ocio y refuerzo educativo

El programa es gestionado por 67 entidades privadas sin ánimo de lucro de toda la comunidad y se desarrolla en periodo vacacional, fuera del calendario escolar, preferentemente en las zonas desfavorecidas identificadas en el contexto de la Estrategia Regional Andaluza de Cohesión e Inclusión Social (Eracis).

Así, se ofrece continuidad en la satisfacción de las necesidades nutricionales de los menores que vienen siendo atendidos mediante el Programa de Refuerzo de la Alimentación Infantil en los centros educativos públicos de Andalucía durante el curso escolar.

Las acciones que se llevan a cabo comprenden actividades socioeducativas relacionadas con el refuerzo de los contenidos curriculares y de hábitos saludables sobre alimentación e higiene, de ocio y tiempo libre (talleres deportivos, de reciclaje, manualidades, teatro, playa o piscina) y de carácter artístico, además de asistencia alimentaria en el desayuno, almuerzo y merienda.

Además, estas escuelas son, según resalta la Junta, «un entorno favorable para detectar posibles situaciones de riesgo» y, para este curso, «se convierten en un recurso importante para atender también a los niños de familias ucranianas refugiadas y ayudar a su integración social».